Cuando
escuchamos el nombre “New York Knicks” asociamos rápidamente el baloncesto con
el glamour que da la Gran Manzana. Noche tras noche, se encienden las luces de
un Madison Square Garden repleto de aficionados en busca del mejor baloncesto
del planeta. Siempre se ha conocido que la pista neoyorquina era la que te
hacía pasar de buen jugador a superestrella, si triunfabas ahí, podías hacerlo
en cualquier lado. Sin embargo, con una mayor asiduidad, en los últimos tiempos
no eran jugadores locales los que encontraban su madurez en ese lugar sino
estrellas foráneas. Kobe Bryant, Lebron James, Dwayne Wade y muchas otras
figuras han tenido grandes actuaciones que los han consagrado en la mejor liga
de baloncesto del mundo, la NBA.
Tras una década
llena de fracasos, traspasos fallidos, idas y venidas de entrenadores y “General
Managers” se marcó una fecha para un drástico cambio de rumbo. Verano de 2010,
algunos de los jugadores dominantes de la liga finalizaban sus contratos y
pasaban a ser agentes libres. La idea era fichar a una gran estrella en ese
verano y rodearla de buenos jugadores con un proyecto joven que diera
resultados a medio-largo plazo, todos ellos comandados por Mike D`Antoni,
especialista en el denominado tipo de juego “Run & Gun”. Todo parecía encajar,
estrellas, juego espectáculo, Nueva York y se pusieron manos a la obra.
Madison Square Garden |
El premio
gordo de dicho periodo de traspasos era Lebron James, todos lo querían, pero
por primera vez, los Knicks no se volvieron locos con su contratación, sabían que
había otras opciones, Dwayne Wade, Chris Bosh, Joe Johnson, Amare Stoudamire
eran las principales piezas que querían para su puzzle. Finalmente fue este último,
Stoudamire quien fue llevado a la Gran Manzana con su nuevo gran contrato bajo
el brazo. Acostumbrado a un juego rápido y directo ya que venía de compartir
vestuario con Steve Nash realizando grandes campañas para los Phoenix Suns,
además, había coincidido con D`Antoni también en la ciudad de Arizona.
Una vez
encontrada la parte central del equipo, ya solo faltaba rodearla de buenos
jugadores que cambiasen la nefasta trayectoria que venía arrastrando el equipo
neoyorquino. Se produjeron unas idas y venidas de jugadores que prácticamente renovaron
la plantilla al completo. Jugadores como Felton, Mason, Turiaf o Fields
llegaron al Madison Square Garden para complementar a los Gallinari, Wilson
Chandler y la flamante nueva adquisición Stoudamire.
Amare Stoudamire |
Sin
embargo, a pesar de tener un quinteto de calidad,
Felton-Fields-Chandler-Gallinari-Stoudamire que desde el primer día dio visos
de entenderse a la perfección haciendo partidos realmente buenos, desde los
despachos se empezó a pronunciar en demasía un nombre, Carmelo Anthony. La
estrella de Denver Nuggets pasaba a ser agente libre en el siguiente verano y
no querían perder la oportunidad de hacerse con sus servicios. Quizás el miedo
a que otro equipo se entrometiera en el fichaje u otros motivos que difícilmente
conoceremos hicieron que se intentara un traspaso en mitad de la temporada que
le concediera a “Melo” una más que generosa renovación de contrato y a su club algún
tipo de beneficio que no existiría de llegar a verano. Durante varios meses, el
culebrón “Melo” ocupaba páginas y páginas de cualquier diario deportivo tanto
nacional como internacional, múltiples combinaciones que harían realidad el
traspaso. Desde el primer momento, Denver se posicionó en que en caso de
traspaso, Chauncey Billups iría en el “pack”, algo que los Knicks en principio
no aceptaban, ya que un jugador de su edad y su carga salarial les parecía inaceptable
para continuar con el proyecto de medio plazo que les ocupaba.
Pasaba el
tiempo y se acortaban las opciones de un traspaso ya que se acercaba la fecha
límite para traspasos en temporada. A última hora y en un acto que podríamos denominar
de “desesperación”, los Knicks aceptaron todas y cada una de las pretensiones
de Denver por Carmelo Anthony. El equipo de Nueva York enviarían a Gallinari,
Chandler, Felton y Mozgov a cambio de Billups y Anthony. Tres jugadores
titulares del nuevo proyecto neoyorquino a cambio de un base que posteriormente
seria “cortado” en el siguiente verano y la figura mediática de Carmelo
Anthony, conocido anotador y vendedor de camisetas al mismo nivel que
individualista.
Carmelo Anthony y Chauncey Billups |
Esa
temporada acabó como se esperaba, derrota en primera ronda de playoffs a manos
de Boston Celtics, era la primera aparición en la post-temporada desde 2004,
pero sin llevarse a engaño, buena parte de esa clasificación la dejó
encarrilada la plantilla que se diseñó primeramente.
La
siguiente temporada comenzó el fichaje de Tyson Chandler para terminar de reforzar
la defensa y el juego interior, se buscaba que Amare ocupara un mayor
protagonismo anotador en detrimento del rebote y la defensa, algo que no
ocurrió ya que la mayoría de balones pasaban por Carmelo Anthony que se
encargaba de terminar la jugada. Se ficharon bases de avanzada edad con el fin
de aportar experiencia, Bibby y Baron Davis, jugadores relegados a un segundo
plano cuando por un cúmulo de lesiones tuvo que salir Jeremy Lin. Todos
conocemos ya la historia de “Linsanity” y lo que aportó a la franquicia de
Nueva York. Tanto prensa como ex-jugadores no paraban de proclamar el mal
ambiente y la lucha de egos entre la nueva estrella emergente, “Melo” y “Amare", a pesar de sus continuas negativas a tales acusaciones. Como agravante, en mitad de la temporada, Mike Woodson tuvo que ponerse al frente del equipo técnico tras la salida de Mike D`Antoni. La temporada concluyó al igual que la anterior, derrota en primera ronda de
Playoffs, aunque esta vez fue a manos de los posteriores campeones Miami Heat.
Prigoni en su debut con los Knicks. Foto de basket4us.com |
Tras estos
precedentes, nos encontramos a las puertas del inicio de la nueva temporada, la
2012/2013 y la plantilla ya cerrada deja lugar a numerosas dudas. Los fichajes
han sido de una edad bastante avanzada, que han convertido a los Knicks en el
equipo con una mayor media de edad de la competición, además, en búsqueda de un
nuevo record, se adquiere también al rookie más longevo de la historia, Pablo
Prigioni con 35 primaveras a sus espaldas se embarca en la aventura americana.
Jason Kidd, Marcus Camby, Kurt Thomas y Rasheed Wallace son las “jóvenes”
estrellas que han de mejorar las últimas temporadas. Junto a ellas, también vuelve
Raymond Felton con ganas de demostrar que estar incluido en megatraspaso de
Carmelo Anthony fue un error.
Así pues,
se presenta una temporada de urgencias, una última oportunidad para el 50% de
la plantilla “knick” y un proyecto a muy corto plazo. Es algo complicado de
entender como tras varios años “ahorrando” para hacerse con uno de los grandes
agentes libres en 2010 y formar un proyecto sin prisa en torno a él se puede
pasar en solo dos temporadas a algo de este estilo. Un último condicionante de
las urgencias puede ser la incursión del equipo de moda, los Nets, que se han
mudado de New Jersey a Brooklyn con Jay-Z y el magnate ruso Prokhorov a los
mandos con el fin de convertirse en el primer equipo de Nueva York.
Plantilla New York Knicks 2012/2013 |