miércoles, 28 de marzo de 2012

El difícil relevo del portero


Oliver Kahn, Fabien Barthez, Francesco Toldo, Dida, han sido todos porteros de primerísimo nivel pero con algo mas en común. Sus ultimas temporadas fueron completamente para olvidar tanto por su parte como por la de los aficionados de sus respectivos equipos.

Cualquier jugador que compita a nivel profesional ve mermadas sus facultades con el paso de los años, es algo lógico y totalmente entendible. El problema viene en mayor medida para los porteros, a los que la edad no les juega buenas pasadas en su mayoría. Es por todos conocido, que la vida deportiva de un portero es quizás algo mas larga que la de un jugador de campo debido al menor desgaste físico sufrido, pero sin embargo, a diferencia del resto de jugadores, pasan por una etapa mas, bastante sectaria en este caso.






La vida deportiva podría dividirse en tres etapas, la de mayor juventud, donde el descaro, el físico y los reflejos copan la personalidad del jugador, en este caso el portero. Unos años mas adelante, este físico y reflejos empiezan a ser sustituidos por la experiencia obtenida por años de carrera, creando una mayor consistencia en el jugador pero sin sufrir un gran merme en las características físicas. Y la que suele ser la última etapa en la carrera del jugador, al sobrepasar la treintena, donde toda la experiencia adquirida tapa las carencias del físico. En esta etapa, vemos en muchas ocasiones el nivel mas alto de ciertos jugadores, normalmente en posiciones de gran peso estratégico y donde se premia mas la mentalidad y la experiencia. En este grupo podríamos ver jugadores como Puyol, Pirlo o Zidane.

En el caso de los porteros, nos encontramos con una última etapa, la que sucede al borde de su retirada y que raramente propicia un nivel intermedio. Por un lado, están los porteros que ensalzan aun mas su nivel y que mantienen los reflejos y colocación haciendo casi imprevisible cuando decidirán colgar los guantes. Por ejemplo, Palop, Van der Sar, Buffon, Ricardo, etc. Sin embargo, también existe el lado opuesto, porteros que viven sus últimos años muy a la sombra de su nivel y que continúan vagando por equipos de gran nivel, en muchas ocasiones equipos en los que han disputado la mayor parte de su carrera y donde no se les da el relevo cuando corresponde cegados por sus mejores momentos, sin ser conscientes de la lejanía de ese nivel.







A los nombrados al principio de esta entrada, podríamos incluir los casos mas recientes, Jens Lehman, el recientemente retirado alemán, que a pesar de sus infames últimos años en el Arsenal, consiguió un nuevo contrato con Stuttgart donde no llegó nunca a recuperar su mejor nivel, aun así, volvió unos meses al Arsenal ante la plaga de lesiones, donde finalmente se retiró siendo el jugador mas longevo en disputar un partido de Premier League para los "gunners".

Pepe Reina, conocido por su gran nivel exhibido en Liverpool y la alternativa a la portería de la selección española durante varios años, sus ultimas actuaciones han hecho encender la maquinaria en Anfield para buscarle sustituto además de no estar considerado ni entre los cinco mejores porteros nacionales. Quizás este caso no debería estar considerado junto con los anteriormente mencionados por la juventud de Reina, pero su rendimiento en los últimos meses hacen dudar de la dirección que tomará su carrera.

El caso mas reciente y por el que me he decidido a escribir sobre este tema es Iker Casillas. El para mi, mejor portero de los últimos años, está empezando a sufrir el mal del portero veterano. Fallos de colocación, inseguridades ante balones altos, hacen barruntar el calvario que está por llegarle. Y lo que es mas preocupante para el aficionado madridista, la falta de relevos en el mercado hacen pensar que aun queda bastante hasta verle abandonar la portería del Santiago Bernabeu. Con Courtois marcado ya como el sustituto de Cech para el Chelsea y Lloris blindado por el Olympique de Lyon solo queda confiar en el despunte de algún canterano como ya ocurrió años atras en el declive de la carrera de Bodo Illgner, cuando dio paso al mencionado Casillas.